En los textos anteriores, la escritora adventista Elena G. de White aclara muy bien acerca de la inspiración. Y los insto a que ustedes puedan leer esos libros indicados a pie de
pagina. Ella también dice que cada parte de la Biblia es inspirada por Dios, y que es provechosa.
Deberíamos leerla sin preconceptos y creyendo que las cosas que allí están son verdades y se así hacermos, recebiremos toda las bendiciones que Dios nos ha prometido.
El apóstol Pedro dice que hay en las Escrituras “cosasdifíciles de entender, que los ignorantes e inconstantes tuercen,… para supropia destrucción” (2 P 3:16). Los incrédulos han presentado las dificultadesde las Sagradas Escrituras como un argumento en contra de la Biblia; pero muylejos de ello, estas constituyen una fuerte prueba de su divina inspiración. Sino contuvieron acerca de Dios sino aquello que fácilmente pudiéramoscomprender, si su grandeza y majestad pudieran ser abarcadas por inteligencias finitas,entonces la Biblia no llevaría las credenciales inequívocas de la autoridaddivina. La misma grandeza y los mismos misterios de los temas presentados,deben inspirar fe en ella como Palabra de Dios.